Zachary Prescott

Zachary es un joven normal. No llama la atención por su cuerpo mosculado, sus bíceps voluptuosos o sus grandes ojos. ¿Por qué? Porque no tiene nada de eso. Tan solo es un joven de contextura media en época de crecimiento, con un rostro enteramente adorable y común. Con unos ojos azules simples pero llamativos. Y con un cuerpo totalmente acorde a su edad. Nada de músculos impresionantes, cabellera sedosa, … Tan solo un muchacho común, con sus ojos color cielo y sus dientes blancos.

Muchacho que conquista pero no por su “espectacular” físico - que algo de eso tiene -, sino por su asombroso, llamativo y excitante interior.

¿Qué podemos decir de Zachary? Transparencia. Es tal cual cómo podemos observarlo, dulce, divertido, simpático, gracioso, extrovertido, atento, caballeroso, risueño, inocente, generoso, inteligente, distraído, desastre, romántico, llamativo,… Adjetivos y adjetivos incansables e innumerables que pueden catalogar a este diferente y atractivo rubio.

Extrovertido, divertido, espontáneo. Esas son las tres palabras globales que definen la personalidad del de ojos claros. Su espontaneidad y extroversión llaman la atención de cualesquiera, siempre tiene algo que decir, una tontería que soltar o una estupidez con la que sorprenderte. Su sentido del humor es brillante y divertido, cualquier persona pasa un rato realmente agradable en compañía del muchacho, y se puede decir que a su lado es difícil tener caras largas, a su lado las sonrisas y carcajadas están aseguradas. Y lo mejor, el joven no lo intenta ser así, simplemente es de esta forma.

Confiado e inocente. Cualidades un tanto negativas que forman parte de este estudiante universitario, confía demasiado en los demás. Cree que todos son como él, parece un inocente y dulce de niño de 10 años. Para él todo el mundo es sincero, bueno y fiel; debido a esto se lleva más de un golpe en cuanto a amistades ya que se siente traicionado en demasiadas ocasiones y realmente rápido. A pesar de todo esto el joven no aprende y vuelve a tropezar una y otra vez con la misma piedra.

Inteligente; un adjetivo que lo ha acompañado a lo largo de su vida. El rubio es realmente inteligente y siempre lo ha demostrado hasta estos últimos años, ¿Por qué? Vergüenza, cree que la inteligencia esta reñida con ese gran sentido del humor, por lo que deja ver claramente esta cualidad y esconde la otra. Se avergüenza que lo vean leyendo, estudiando algún idioma o practicando con algún tipo de instrumento. Se siente más cómodo y a gusto pasando de todo, haciéndose el desastre y prestando realmente poca atención a los estudios o a su cultura. Aunque de forma discreta y oculta no duda en coger un libro o culturizarse. Vago; esta notoria cualidad del muchacho es contradictoria a la anterior, debido a esto suele costarle demasiado centrarse en cuanto a los estudios. Le pesa la vida, las piernas, los brazos y el culo (xD). A veces es el muchacho más intranquilo que hay en toda la facultad, pero otras veces es igual a una marmota.

Caballeroso, atento y romántico. ¿Quién lo diría? El rubio parece el típico y gracioso muchacho que solo vive de sus gracias y al cual las chicas escapan o el típico amigote que nunca puede ser visto como algo más. Pero no, todo lo contrario. Su dulzura, su sentido del humor y su caballerosidad llama la atención de cualquier muchacha que comparta con él más de 10 minutos. Y no podemos olvidarnos de su romanticismo, de su idea del amor… “amor”, sentimiento extraño que nunca han podido definir y que lo han empezado a hacer los filósofos griegos. Siempre ha sentido curiosidad por este, siempre ha defendido dicho sentimiento, eso sí, no hablaba libremente de él. Tenía cierta vergüenza a ser tachado de amigo enamoradizo, estúpido e idiota que corre detrás del amor. Pero ahora todo le da igual, ahora no se avergüenza de demostrar ese amor que cree que ha encontrado junto a su pareja. No le avergüenza verse como un idiota o estúpido si así se siente feliz.

Charles D. Prescott (padre): [Conocido Político] Demasiado estricto y autoritario, su relación no es muy buena ya que este quiere que su hijo sea la viva imagen de él. Un adolescente refinado, culto, serio y educado, no un simple payaso que se encarga de hacer reír a los demás. Un hombre de futuro y buen puesto, no deja que su hijo sea tal cual es.

Elizabeth M. Prescott (madre): [Desempleada] Sigue los pasos de su marido, pero no duda en apoyar a su hijo en más de una ocasión, por no decir siempre, eso sí, no de forma clara ante Charles. Siempre esta ahí para ayudarlo, para mandarle dinero, para guiarlo. Su relación es bastante buena ya que al contrario que el Señor Prescott, ella es dulce, amable y cariñosa.

Hace 20 años, Zachary vino al mundo en una preciosa cuna de oro, eso es, proviene de una familia de clase alta. Su madre es desempleada debido a esto ya que siempre se ha ocupado de su familia, y su padre un conocido político, político que para él siempre estará en las tinieblas –no le gusta que los relacionen aunque eso es más que imposible -. Desde que era tan solo un enano siempre ha tenido lo que ha querido, bastante caprichoso pero a aprovechado todo aquello para ser una persona mejor, para aprender en la vida. Viajes, idiomas, instrumentos, lo ha hecho un muchacho demasiado inteligente y culto, cosa que también le gusta esconder. Así es el rubio, demasiado raro, demasiado extraño.

¿Cómo cambió?¿Por que no reconoce sus orígenes? Se ha dado cuento como son las personas de su entorno, superficiales, fríos, pedantes, crueles,… no quería ser así, no quería despreciar a las personas por el mero hecho de ser menos que él porque no, no lo eran. Debido a eso intentó alejarse de aquel mundo, intentó escapar de aquella pequeña burbuja a la que lo estaba guiando su padre, y así fue como entró en la universidad. Motivado y apoyado por su madre entró para seguir sus estudios, estudios no tan lejanos a los que quería su padre, si al final intentó ser el hijo adorado y rebelde pero no pudo, ¿Qué drástico verdad? Alejarse de ciencias políticas para terminar en derecho, en fin, por lo menos el rubio lo intentó.